LA PERSEVERANCIA
Aunque es cierto que la perseverancia no garantiza el éxito, es imposible tener éxito sin perseverancia.
Es la capacidad para seguir adelante a pesar de:
• Obstáculos
• Crisis
• Desánimo
• Aburrimiento
• Frustración
• Los propios deseos de rendirse
Cada vez que terminas lo que has empezado, vuelves a intentar a pesar de un fracaso inicial, te enfocas en los objetivos y trabajas en tu tarea, practicas la perseverancia.
Por el contrario, en el extremo opuesto de la perseverancia, las personas son perezosas, se sienten derrotadas demasiado pronto o son aquellas que ni siquiera lo intentan, buscan lo fácil, toman atajos siempre que pueden, pierden el interés con facilidad y abandonan ante la más mínima dificultad.
La persistencia es vencer la tendencia que tenemos a abandonar.
Las personas más perseverantes son aquellas que:
• Confían en si mismas
• Saben que están capacitadas para hacerlo bien y tener éxito
• Creen que pueden ejercer control sobre los resultados.
• Esperan tener éxito aun tras un resultado negativo.
• Son optimistas.
• Tienen una alta autoestima.
• Tienen un alto deseo de control y autonomía.
• El estado de ánimo es fundamental, así que persisten más las personas con estado de ánimo positivo.
• Cuando establecieron su meta voluntariamente, la consideran importante, están motivadas y les gusta.
• Quienes hacen de su actividad una tarea amena y divertida.
El lado negativo de la perseverancia
Al igual que abandonar pronto puede perjudicarnos, también puede el excedernos y seguir perseverando cuando ya no tiene ningún sentido hacerlo es contraproducente. De ahí la importancia de saber cuando hay que darse por vencido y seguir el plan B.
Insistir en un objetivo inútil solo supone un gasto de esfuerzo y tiempo que no producen ningún resultado.
Por tanto, la persistencia solo es útil cuando se usa adecuadamente. Evalúa si tu propósito tiene posibilidades de éxito a pesar de haber fracasado la primera vez, o solo traerá más fracaso. Cuando no se pueden controlar los resultados o la meta es imposible de alcanzar, es preferible abandonar. Por tanto, la clave del éxito no es la persistencia en sí misma, sino la capacidad para saber cuándo perseverar y cuando rendirse.
Consecuencias y beneficios de la perseverancia
• Te da la fortaleza para alcanzar metas difíciles.
• Valoras los logros obtenidos, por el nivel de dificultad que tuviste.
• Desarrollas tus habilidades y nuevas técnicas para enfrentar lo desconocido.
• Te sientes en control y con la capacidad de alcanzar tus metas.